El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) sigue con un cuello de botella a pesar de que por parte del Gobierno se afirma que está todo solucionado.
En las últimas semanas el Gobierno ha comunicado que el colapso en el SEPE es cosa del pasado y que todas la gestiones incluidas el pago de los ERTE están al orden del día, tanto la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz como el director general del SEPE, Gerardo Gutiérrez aseguraron que ya no existe tal colapso.
Sin embargo a Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) sigue denunciando que el atasco sigue: las citas presenciales para dirimir los problemas surgidos por el impago de las prestaciones debidas se retrasan hasta tres meses. Y, a partir, de ahí, a esperar a cobrar. Debido a la dificultad para conseguir una cita previa, en Barcelona se ha dado el caso de pagar por una.
Desde CSIF muestran su preocupación tras el nuevo aumento de afectados por Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), que cerró noviembre con 746.900 trabajadores, según los datos que publica cada mes la Seguridad Social.
Uno de los puntos importantes que consideran importantes desde CSIF y que provocan este colapso es la complejidad en la tramitación de los ERTE, que provoca miles de errores, aumentando las peticiones de citas previas para la atención presencial en las oficinas provocando que se alargue el plazo para conseguir una fecha para la atención presencial.
Aunque esto podría solucionarse a corto/medio plazo, ya que desde el Ministerio de Trabajo se ha anunciado la inversión de 258.000 euros para revisar sus aplicaciones informáticas.
Peticiones del sindicato.
Desde el sindicato señalan que esta situación es insostenible, tanto para las personas afectadas que no cobran en las fechas correspondientes con el agravio que eso supone para que puedan hacer frente a sus pagos (hipoteca, alquiler, comida, etc). Pero también para los propios trabajadores del SEPE que se ven obligados a realizar horas extras, horas que no son suficientes para solventar el problema, al igual que tampoco lo es la subcontratación temporal.
Por ello desde el sindicato solicitan al Gobierno una Oferta de Empleo Público extraordinaria y específica para el SEPE, que contemple una dotación suficiente de recursos humanos, estructurales y profesionales ante esta situación de emergencia ocasionada por la pandemia del coronavirus.
El Gobierno transfiere 2.300 millones al SEPE para pagar las prestaciones
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