Aunque estar en el paro es lo último que un trabajador piensa, sobre todo por la pérdida económica que supone. El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) busca ayudar ante esta situación de desempleo con una prestación contributiva, siempre y cuando la persona haya cotizado mediante su trabajo para tener derecho a ella.
Para poder cobrar el paro es necesario cumplir dos requisitos fundamentales, entre ellos, días cotizados mediante el trabajo. Es por ello que surja la duda de cuánto hay que trabajar para poder solicitar el paro, a la que ha dado respuesta la propia administración pública de empleo.
Aparte de los días cotizados, que además también definirán la duración de la misma, también es necesario que el trabajador esté en una situación legal de desempleo. Básicamente, quiere decir que la perdida del empleo haya sido de forma involuntaria, por lo que un trabajador que ha solicitado romper el contrato de trabajo voluntariamente, no tiene derecho a prestación.
¿Cuántos meses son necesarios para cobrar el paro?
Para poder solicitar el paro, son necesario tener cotizados por trabajo al menos 360 días dentro de los últimos seis años para tener derecho a cobrar la prestación por desempleo a nivel contributivo. Esta es la cantidad mínima de cotización que dará derecho a cobrar 120 días la prestación contributiva, a partir de ahí y tal como se indica en la siguiente tabla, la duración se irá incrementando hasta un tope de 24 meses.
Tabla días cotizados para cobrar el paro
DÍAS COTIZADOS | DÍAS DERECHO COBRO PRESTACIÓN |
de 360 a 539 | 120 (4 meses) |
de 540 a 719 | 180 (6 meses) |
de 720 a 899 | 240 (8 meses) |
de 900 a 1079 | 300 (10 meses) |
de 1080 a 1259 | 360 (12 meses – 1 año) |
de 1260 a 1439 | 420 (14 meses) |
de 1440 a 1619 | 480 (16 meses) |
de 1620 a 1799 | 540 (18 meses) |
de 1800 a 1979 | 600 (20 meses) |
de 1980 a 2159 | 660 (22 meses) |
desde 2160 | 720 (24 meses – 2 años) |
¿Y si trabajo a tiempo parcial?
Seguramente cuando descargas la vida laboral teniendo un contrato a tiempo parcial, digamos a media jornada, necesitas dos días para cotizar un día. Por ello es posible pensar que la cotización por desempleo es igual, pero no.
A la hora de contar los días cotizados no influye el tipo de jornada. Es decir, independientemente de tu jornada, cada día que estés en la empresa cuenta como día cotizado por prestación por desempleo.
Esto es así tras modificarse en el año 2018 a través del Real Decreto 625/1985 para cumplir una Sentencia del Tribunal de Justicia Europea que indica lo siguiente:
Cuando las cotizaciones acreditadas correspondan a trabajos a tiempo parcial realizados al amparo del artículo 12 del texto refundido de la Ley del Estatuto de los Trabajadores, se computará el período durante el que el trabajador haya permanecido en alta con independencia de que se hayan trabajado todos los días laborables o solo parte de los mismos, y ello, cualquiera que haya sido la duración de la jornada.
De modo que no importa que un trabajador tengo un contrato de 10, 15, 20 horas a la semana, si ha estado en la empresa dos meses, habrá cotizado por prestación por desempleo esos dos meses completos.
No obstante, la cotización a la Seguridad Social de los trabajadores a tiempo parcial cambiará a partir de octubre y no importará el tipo de jornada que tengan. Es decir, cada día trabajado contará como día cotizado.
¿Hay alguna ayuda en caso de no llegar al mínimo de cotización por desempleo?
Aquellos trabajadores que no alcancen los 360 días de cotización por desempleo en los últimos 6 años, no lo tienen todo perdido en cuanto a protección por desempleo. Pues el SEPE ofrece una ayuda, el subsidio por insuficiencia de cotización o «mini paro«, que tiene una cuantían fija mensual de 480 euros al mes.
Se trata de una prestación no contributiva y su duración puede ser de entre 3 meses y 21 meses, dependiendo de la situación familiar del solicitante. Para solicitarlo es necesario haber trabajado al menos 90 días y no tener rentas superiores al 75% sel SMI.