2020, el año de la pandemia.
El presente año se presentaba como el año en el que todo iba a cambiar con un Gobierno formado por PSOE y Unidas Podemos que anunciaban nuevos cambios en la dirección del país, con una reforma laboral y de las pensiones que sentarían las bases para mejorar la calidad de vida de los españoles, sin embargo apareció el virus del coronavirus y todo los planes cambiaron.
Las pocas expectativas de crecimiento que tenía el país a corto plazo se han esfumado a consecuencia de la pandemia. El impacto que ha tenido en la economía española ha sido de tal magnitud que 7 meses después las empresas que siguen a flote como pueden ni siquiera pueden asegurar la continuidad de su actividad
Destrucción de Empleo
La pandemia y las medidas restrictivas han provocado que en España se hayan perdido más de un millón de puestos de trabajo, no solo los que se suelen originar de forma temporal en algunos periodos del año, como son el verano y la semana santa y estas últimas navidades. También aquellos trabajadores que tras pasar por un Expediente Regulador Temporal de Empleo ahora se están encontrando con la carta de despido en la mano.
Son muchas las empresas que aunque las ayudas les haya servido para mantener a flote su empresa durante los primeros meses y que tras el verano donde se vio una pequeña recuperación que promovió a que los empresarios sacaran de los ERTE aparte de su plantilla sin embargo la segunda oleada que trajo consigo nuevas medidas restrictivas sacudió de nuevo la actividad económica del país.
Noviembre, mes clave
Noviembre fue el mes clave para muchos trabajadores, pues se cumplía el plazo de los 6 meses para muchas empresas que habían solicitado los ERTE a principio de la pandemia, por lo que muchas empresas empezaron a aligerar sus plantillas con el fin de estabilizar su viabilidad.
Durante ese mes España perdió 369.806 afiliados a la Seguridad Social con respecto a los que tenía antes de la pandemia a principios de marzo, de los cuales 142.303 eran trabajadores con contratos indefinidos
A estas cifras hay que sumarles los 746.900 trabajadores que continúan en el limbo de los ERTE, muchos de ellos con problemas para cobrar su prestación.
Aumento de la tasa de paro
Aunque la tasa de paro oficial que ha publicado el Instituto Nacional de Estadística (NIE) se sitúa en torno al 16%, la tasa de paro efectiva en la que se tienen en cuenta a los trabajadores en ERTE y a los autónomos que se encuentran en cese de actividad calculada por la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) ascienda al 21,5 %.
A todo esto hay que sumarle que la pandemia ha provocado la desaparición de 85.950 empresas hasta el mes de octubre, a las que habrá que sumar los cierres de noviembre y diciembre cuando se tengan los datos. El 98% de estas compañías que han desaparecido eran pymes de menos de 50 empleados.
También el número de trabajadores autónomos no ha descendido, pero hay que tener en cuenta que hay alrededor de 375.000 que están cobrando la prestación por ceses de actividad, por lo que estos o han cerrado su negocio de forma temporal o han perdido el 75% de su facturación.
¿Estas en paro? estas son las ayudas disponibles para los desempleados que ofrece el SEPE