Es muy habitual que los jóvenes busquen trabajos que puedan compatibilizar con sus estudios. Así buscan empleos a media jornada o solo para trabajar los fines de semana. Sin embargo, en ocasiones es posible, por ejemplo, que coincida la fecha del examen con la jornada laboral. En estas situaciones el trabajador puede solicitar un permiso para poder examinarse.
El artículo 23 del Estatuto de los Trabajadores, recoge una serie de derechos que permiten al trabajado mantener su puesto de trabajo mientras realiza diferentes cursos formativos, ya sean universitarios, grado, FP o cualquier otro tipo de formación, ya sea esta oficial o no.
Permisos que puede solicitar el trabajador si estudia
Tal y como recoge el Estatuto de los Trabajadores, el trabajador los siguientes derechos en el caso de que estudie y trabaje:
- Permiso para ausentarse del puesto de trabajo por el tiempo necesario e indispensable para acudir a los exámenes e incluso al examen de conducir. Es importante mencionar que salvo que el convenio colectivo diga lo contrario, este permiso no será retribuido, por lo que ese tiempo será restado de la nómina del trabajador.
- Adaptación de la jornada ordinaria de trabajo. Únicamente podrá solicitarse cuando los estudios que se cursen estén conectados con la actividad profesional desarrollada en su puesto de trabajo. Es importante indicar que la empresa puede oponerse en caso de que existan razones objetivas para ello.
- Concesión de los permisos oportunos de formación o perfeccionamiento profesional, con reserva del puesto de trabajo.
- Preferencia a elegir turno de trabajo.
- El teletrabajo también es una opción que puede solicitar el trabajador que esté estudiando. Al igual que la adaptación de la jornada, la empresa podrá oponerse siempre que existan razones para ello.
Por último, aquellos trabajadores que lleven en la empresa al menos un año, tienen derecho a un permiso retribuido de 20 horas anuales de formación profesional para el empleo, vinculada a la actividad de la empresa, acumulables por un periodo de hasta cinco años. Este permiso sí es retribuido, y, por tanto, la empresa no podrá descontar este tiempo de salario al trabajador.