Las personas incluidas en el colectivo LGTBI deberán informar y acreditar su condición ante el Ministerio de Trabajo si quieren ser beneficiarios con carácter prioritario de políticas activas de empleo.
La nueva Ley de Empleo, que el Consejo de Ministros aprobó el pasado mes de junio, traerá nuevas y mejores herramientas para modernizar la orientación laboral. Entre ellas destaca sobre todo la transformación del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) en una Agencia de Empleo.
El objetivo es crear una atención cada vez más personalizada de los servicios de Empleo, ofreciendo un acompañamiento personalizado, con la elaboración de un perfil individualizado de la persona.
Fomentar la inclusión de las personas con más dificultades de acceso al empleo
También se amplían los colectivos de atención prioritaria, que incluyen personas con capacidad intelectual límite, con trastornos del espectro autista, LGTBI, víctimas de la violencia de género, personas en exclusión social, mayores de 45 años, migrantes, beneficiarias y solicitantes de protección internacional, personas gitanas, o de otras minorías étnicas, trabajadores provenientes de sectores en reestructuración.
Estos colectivos tendrán acceso prioritario a programas dirigidos a fomentar la inclusión de las personas con especiales dificultades para el acceso y mantenimiento del empleo o el desarrollo de su empleabilidad.
Tal y como ha informado «El Español» las personas LGTBI, al igual que sucede con las víctimas de violencia género, deberán informar y acreditar su condición para participar en los futuros programas de políticas activas de empleo que ponga en marcha la Administración central en coordinación con las autonómicas.
Cómo se acreditará la orientación sexual
Por el momento se desconoce exactamente como una persona podrá acreditar ante la Administración si es lesbiana, gay, bisexual, transexual o intersexual. Desde el Ministerio de Trabajo indican que se seguirán pautas comunes en la Administración para otros tipos de trámites como un certificado de unidad de convivencia o una declaración responsable.
Fuentes del ministerio dirigido por Yolanda Díaz aseguran que ni el reconocimiento de la condición sexual ni la acreditación necesaria serán conocidas por las empresas que contraten a estas personas a través de la nueva Agencia de Empleo. Es decir, no habrá ninguna marca en el perfil, por lo que su condición sexual será confidencial y las empresas no conocerán la orientación sexual del empleado, al menos por parte de los servicios de Empleo.
Hay que recordar que la orientación sexual, religión, raza o cualquier otra condición o circunstancia personal o social son preguntas que están prohibidas en una entrevista de trabajo para evitar la discriminación, tal y como indica el artículo 14 de la Constitución española.