Los empleados/as del hogar han mejorado significativamente sus derechos como trabajadores con la entrada en vigor en octubre de 2022 del Real Decreto-ley 16/2022.
Además de la protección por desempleo, también tienen más garantías frente al despido. Entre otras cosas, sus despidos deben estar justificados y también deben ser notificados con un preaviso como el resto de trabajadores.
Anteriormente, a esta reforma una familia que tuviera contratada a una empleada doméstica no tenía que justificar su despido, solamente había que avisarlo con al menos 20 días de antelación. Pero ahora, si el despido no está justificado, como sucede con el resto de trabajadores, este es declarado improcedente, teniendo derecho a la indemnización correspondiente.
¿Cómo debe realizarse el despido de una empleada de hogar?
Como a cualquier trabajador, se debe entregar una comunicación escrita a la empleada del hogar, es decir, la carta de despido. No se puede comunicar por WhatsApp ni por teléfono, de ser así automáticamente el despido es improcedente.
En la carta de despido de la empleada del hogar se debe indicar los motivos por los que se toma la decisión de romper la relación laboral. Asimismo, se deben cumplir con un tiempo mínimo de preaviso. Dicho de otra manera, no puedes despedir a tu trabajador de la noche a la mañana. Salvo en los casos que el motivo del despido sea disciplinario, que no es necesario cumplir con un preaviso.
Preaviso para despedir a una empleada del hogar
En el caso de que la empleada del hogar haya prestado sus servicios durante más de un año, se le debe entregar la carta de despido con al menos 20 días de antelación. Si, por el contrario, la antigüedad de la trabajadora doméstica es inferior al año, bastará con 7 días de antelación.
Cuando la empleada trabaje a jornada completa, tendrá derecho durante este tiempo de preaviso a contar con un permiso de 6 horas semanales para buscar un nuevo empleo. Además, este permiso será retribuido, tendría que cobrarlo de forma íntegra.
Igualmente, se permite que los empleadores puedan sustituir el preaviso por una indemnización equivalente a los salarios correspondientes del preaviso al que se tuviera derecho.
Causas para el despido de la empleada de hogar
Además de las causas generales previstas en el Estatuto de los Trabajadores, el Real Decreto también regula unas causas específicas por las que se puede dar por finalizada la relación laboral de una empleada de hogar. Son las siguientes:
- Disminución de los ingresos de la unidad familiar o aumento de sus gastos por causa sobrevenida.
- Modificación sustancial de las necesidades de la unidad familiar que justifican poder prescindir de la trabajadora del hogar.
- Pérdida de confianza de la empleadora, fundamentada de manera razonable y proporcionada en el comportamiento de la trabajadora.
¿Qué le corresponde a una empleada de hogar por despido?
Como cualquier otro trabajador le corresponde su finiquito y su indemnización por despido.
La indemnización por despido es de 12 días de salario por año de servicio, con un límite de seis mensualidades. Esta indemnización solo se aplica a contratos firmados a partir de 1 de enero de 2012. Aquellos firmados con anterioridad, tendrán derecho a una indemnización de 7 días de salario por año de servicio con un máximo de 6 mensualidades.
En el caso de que el despido sea disciplinario, no se tiene derecho a indemnización.
Del mismo modo, si no se cumple con el protocolo, es decir, no hay carta de despido, preaviso o no se justifica el despido, entonces el despido es improcedente. Esto significa que la empleada del hogar tiene derecho a una indemnización de 33 días por año hasta un máximo de 33 días por año trabajado.
Claro está, para que el despido sea declarado improcedente, se debe ir a juicio, que dará la opción al empleador de o bien pagar la indemnización o reincorporar a la trabajadora, abonándole los salarios de tramitación.
Podría darse el caso de que la persona empleadora se declarase insolvente. Ante esta situación, las empleadas del hogar también están protegidas, ya que cotizan por el Fondo de Garantía Salarial (FOGASA), quien se hará cargo de las indemnizaciones.
