La prestación por desempleo, es decir, el paro, es una ayuda económica del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Tal y como indica en su web, el paro es una prestación contributiva que protege la situación de desempleo de quienes, pudiendo y queriendo trabajar, pierden su empleo de forma temporal o definitiva o incluso vean reducida su jornada ordinaria de trabajo.
El paro es un derecho que genera cada trabajador por cada día cotizado, así lo mínimo que se exige para cobrar esta prestación es tener 360 días cotizados.
Muchos desempleados se preguntan que pasa si, mientras cobro el paro, encuentro trabajo. En este artículo te vamos a indicar que opciones tienes si te encuentras en esta situación.
Estoy cobrando el paro y encuentro empleo
Lo primero que debes saber, es que si estás cobrando una prestación por desempleo y vas a comenzar a trabajar, debes comunicarlo al SEPE. Si revisas tu solicitud de prestación, verás en el apartado de «obligaciones y compromisos» que debes solicitar la baja en la prestación.
Sanciones del SEPE por no dar de baja tu prestación al encontrar empleo
Una vez realices esta comunicación al SEPE, ya sea de forma presencial o telemática, darás de baja tu prestación por desempleo. Solicitar la baja de la prestación no significa que la pierdes.
Pero esto no quiere decir que la pierdes. Supongamos que encuentras un trabajo con el tipo de contrato indefinido, la empresa te da de alta en la Seguridad Social y cotizas de nuevo. Pero resulta que no superas el periodo de prueba.
Si sucede este caso, una vez acudas al SEPE, podrás reactivar tu prestación por desempleo y seguir cobrando el paro durante el tiempo que te queda por cobrar.
Pero ojo, si el caso es que comienzas a trabajar y resulta que el trabajo no es lo que esperabas y pides la baja voluntaria, entonces no puedes reacuñar el paro. Recuerda que las prestaciones están destinadas a los trabajadores que pierden su empleo de forma involuntaria.
Seguir cobrando el paro mientras trabajo
Otra opción que tienes es poder compatibilizar el paro y el trabajo, es decir, seguir cobrando tu prestación por desempleo a la vez que la nómina laboral.
Lógicamente, el trabajo no puede ser a jornada completa y además la prestación se verá reducida proporcionalmente a tu jornada laboral.
Por ejemplo, si cobrabas 700 euros de prestación (70% de la base reguladora) y encuentras un trabajo a media jornada, pues tu prestación se reducirá al 50%. Ahora bien, ten en cuenta, que las prestaciones pasados los 180 días pasan a ser el 60% de la base reguladora, de modo que habría una nueva bajada en tu prestación.
En este ejemplo, el 60% de la base reguladora (1.000 euros) serían 600 euros, pero como el trabajo es a media jornada (20 horas semanales) se reduce al 50%, por tanto, pasaríamos en este caso a cobrar 300 euros, unos 150 euros menos.
