El subsidio extraordinario para empleadas del hogar puesto en marcha por el Gobierno durante la pandemia del coronavirus no será prorrogado una vez concluya su vigencia, por lo que muchas empleadas que continúan percibiendo esta prestación quedarán de nuevo desprotegidas.
Este subsidio que fue concedido al menos a 23.473 trabajadoras del hogar, que tuvo al igual que las demás prestaciones muchos retrasos en su tramitación y por consiguiente el ingreso de las nóminas a sus beneficiarios.
El SEPE por su parte puso como excusa en estos retrasos en el abono de este subsidio a la falta de una herramienta de gestión informática.
Además hubo numerosas quejas del colectivo debido a que los requisitos impuestos impedían a muchas de las trabajadoras poder acceder a esta prestación quedando desprotegidas sin ningún tipo de ingresos. Se estima que hay unas 580.500 personas que están desempeñando esta ocupación, pero no llega ni a la mitad las que están dadas de alta en la seguridad social.
Finalmente y tras más de 4 meses desde que se puso en marcha (1 de abril) y tras asegurar el SEPE que haría el pago en julio, las trabajadoras que lo solicitaron y fueron aceptadas sus peticiones empezaron a recibir el ingreso de su prestación.
A pesar de que este subsidio cuya cantidad a percibir es el 70% de la base de cotización del trabajador siendo el tope de la cuantía el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), es decir 950 euros, ha ayudado a muchas trabajadoras de este sector a poder seguir adelante durante estos duros meses, el Gobierno ha descartado su prórroga.
En su lugar, busca una fórmula para implantar una prestación estructural y que sirva para la incorporación definitiva de este colectivo al sistema de protección social.