Con solo 10 años, Jacob Heitmann, un niño de Indiana, ha convertido su pasión por la impresión en 3D en un negocio bastante rentable, pues genera más 1.700 dólares que al cambio son más de 1.600 euros al mes.
Su historia comenzó cuando pidió en 2023 como regalo de cumpleaños una impresora 3D, y es que Jacob no es un niño común, al parecer desde muy muy temprana edad mostró interés en los negocios. Sus padres, siempre apoyándolo, le compraron una Ender de Creality por 300 dólares, marcando el inicio de su exitoso viaje empresarial.
Esta historia confirma que con dedicación, creatividad y apoyo familiar, se puede convertir un sueño en un negocio sin importar la edad.
Todo sobre la impresión 3D lo ha aprendido por su cuenta
Hoy en día hay muchas herramientas para aprender y una de ellas son los conocidos vídeos de YouTube, donde se pueden encontrar tutoriales de todo tipo. De modo que gracias a esos vídeos y las lecciones en Outschool.com, dominó las técnicas de impresión 3D mientras creaba diseños innovadores, como un colorido cráneo de plástico arcoíris. La combinación de su creatividad y constancia le permitió optimizar su tiempo, imprimiendo mientras asistía a sus clases de cuarto grado.
Un negocio en crecimiento
En enero de 2024, Jacob lanzó oficialmente su negocio de impresión 3D. Vendiendo juguetes y artículos decorativos a sus compañeros, a través de su sitio web y en Etsy, logró ingresos superiores a 1.700 dólares en pocos meses. Sus productos, cuyo precio ronda los 20 dólares, unos 19 euros al cambio, han llamado la atención de clientes por su diseño y calidad.
Como todo negocio en crecimiento, Jacob sabía que necesitaría adquirir una nueva impresora para poder hacer frente a la alta demanda que estaba teniendo sus productos. Por ello, convenció a sus padres para adquirir una segunda impresora 3D, la Bambu Lab P1S, con capacidad para imprimir en múltiples colores.
Una nueva impresora que nada tenía que ver con la primera, sobre todo en el precio, pues si la primera costó 300 dólares, esta ya multiplicaba por 3 ese precio (949 dólares). Gracias a esta nueva adquisición ha podido expandir su catálogo y mejor la calidad de sus creaciones.
Primeros desafíos y oportunidades
El primer encargo significativo de Jacob llegó con una solicitud de 12 réplicas de la Torre Chase de Chicago. Inicialmente, planeó cobrar 20 dólares por pieza, pero su padre, aprovechando su experiencia empresarial, le aconsejó aumentar el precio a 45 dólares, generando un total de 540 dólares.
Su negocio lo compagina con la escuela
Si bien es digno de admirar que con apenas 10 años ya se haya convertido en un emprender, no hay que olvidar que Jacob enfrenta desafíos comunes para un niño de su edad: equilibrar la escuela, las actividades extracurriculares y su emprendimiento. Sus padres han implementado estrategias como activar un «modo vacaciones» en su tienda de Etsy durante viajes familiares, garantizando que no se sienta sobrecargado.