La reunión de este lunes para la reducción de la jornada laboral en España para pasar de las actuales 40 horas a 37,5 horas ha dado un giro inesperado. En un intento por acercar posturas con la Patronal, que desde un principio se ha mostrado contrario a esta reducción, sobre todo por la negativa del Gobierno a ampliar el límite de horas extraordinarias.
Desde el Gobierno han planteado a las empresas la posibilidad de incluir mayor flexibilidad en la distribución de la jornada irregular de los trabajadores. Una medida que permitiría a las empresas concentrar un mayor número de horas en periodos donde la carga de trabajo es mayor, siempre y cuando el número total de horas anuales no sobrepase el cómputo de la nueva jornada ordinaria.
Pero no solo eso, para convencer a la Patronal, también estarían abiertos a ampliar el plazo para la entrada en vigor de la norma, algo que no ha gustado a los sindicatos y que ya han avisado al Gobierno que si tras el verano no se ha implantado la nueva jornada laboral, convocarán una huelga.
Ampliación del plazo para la entrada en vigor de la reducción de la jornada
El secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, al ser preguntado por la posibilidad de que el Gobierno amplíe el plazo para la entrada en vigor de las 37,5 horas semanales, ha afirmado que: «hay muchas maneras de, junto con la negociación colectiva, establecer una entrada en vigor que sea lo suficientemente flexible para que nadie tenga que incorporar de golpe y porrazo una reducción de jornada que podría no asimilar».
📢 Lo decimos alto y claro: ¡si no hay acuerdo habrá movilizaciones!
La reducción de la jornada laboral debe ser YA y pedimos al gobierno que en ningún caso acepte el bloqueo patronal.
‼️Por la reducción de la jornada‼️
¡No perdamos más tiempo!
Ganemos vida ✊❤️ pic.twitter.com/SajacRrAvm
— COMISIONES OBRERAS (@CCOO) July 8, 2024
Los sindicatos rechazan los cambios que supongan un retraso en la entrada en vigor de la reducción de la jornada
Ante estas afirmaciones, los sindicatos se han mostrado contrarios a que la entrada en vigor de esta nueva medida que busca mejorar la calidad de vida de las personas trabajadora se dilate más en el tiempo.
Es más, ha recordado que la última reducción de jornada, que se realizó en 1983, se hizo sin transitoriedad y «no vino el apocalipsis», por lo que ha hecho un llamamiento a CEOE y Cepyme a aceptar de manera clara la reducción de jornada y concretar su posición y, sobre todo, por avanzar en las negociaciones.
Por ello, los sindicatos avisan que habrá huelga después del verano si no se reduce la jornada laboral, tal y como había prometido el Gobierno.