Con la última reforma laboral los contratos indefinidos han aumentado, de modo que ya rozan el 50% del total de las contrataciones. Sin embargo, estos buenos datos se están siendo empañados por los datos de despidos.
Como ya explicamos anteriormente, hoy en día sigue siendo muy fácil despedir a un trabajador, no es nada nuevo ni tiene que ver con la actual reforma, aunque los sindicatos en su día manifestaron su descontento por no derogar la reforma de 2012 que abarato el despido.
Los contratos indefinidos han aumentado, pero a su vez, tal y como indican los números de la Seguridad Social, los despidos por no superar el periodo de prueba han aumentado un 900%.
Más despidos en los contratos indefinidos
Aunque un contrato indefinido puede dar la sensación de estabilidad, y lo cierto es que debería ser así, lo único claro en un contrato indefinido es que no hay fecha de caducidad escrita en el contrato.
Este aumento en los despidos durante el periodo de prueba tiene una simple explicación y radica en la vía de escape que han visto muchas empresas para evitar los sobrecostes de un contrato temporal de corta duración.
La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha puesto importante trabas al contrato temporal, sancionado los contratos de corta duración. Una medida con la que se buscaba frenar la alta temporalidad en el empleo. De modo que estos contratos tendrán una cotización adicional a cargo del empresario a la finalización del mismo.
El sindicato USO ha denunciado esta «picaresca» de los empresarios que tiene como consecuencia que los trabajadores siguen sin trabajo fijo a pesar de firmar un contrato como indefinido.
El periodo de prueba, la vía de escape
Para evitar estas sanciones, los empresarios han visto una «puerta trasera» con la que incluso pueden ahorrar costes, el periodo de prueba.
Tal y como indica el artículo 14 del Estatuto de los trabajadores, el periodo de prueba para técnicos titulados no podrá exceder de los seis meses, mientras que para el resto de trabajadores no podrá superar los 2 meses. En las empresas de menos de 25 trabajadores el periodo de prueba no podrá exceder de tres meses para los trabajadores que no sean técnicos titulados.
De este modo, el empresario puede dar por finalizada la relación laboral, justificando que no se ha superado el periodo de prueba, evitando así las sanciones para los contratos de corta duración.
Pero hay algo más y que resulta mucho más beneficioso para el empresario. El despido durante el periodo de prueba no tiene indemnización, de modo que es otro coste que se ahorraría el empresario.
Recuerda que en un contrato temporal, una vez finalizado, salvo que el despido sea disciplinario si tiene indemnización. La indemnización es de 12 días de salario para año de trabajo. Aunque el importe de la indemnización no sería una gran carga, sigue siendo un coste adicional que se ahorran los empresarios.
Por último, hay que señalar que la indemnización no es lo mismo que el finiquito. Siempre que finaliza un contrato laboral, ya sea por despido, baja voluntaria o fin de contrato, el trabajador tiene derecho a finiquito.
