La cuantía de la pensión de jubilación contributiva, depende de los años cotizados y de cuanto se ha cotizado durante esos años. No sucede lo mismo con las pensiones no contributivas que tienen una cuantía fija.
Cada año, son muchos los trabajadores que se acercan a la edad de jubilarse y se preguntan qué pensión van a cobrar el día de su esperado retiro.
Para poder acceder a la pensión contributiva, es necesario haber cotizado a la Seguridad Social durante al menos 15 años. Dos de ellos, han de estar comprendidos en los últimos 15 años naturales antes de la fecha de solicitud de jubilación. Y por supuesto tener la edad ordinaria correspondiente para solicitar la pensión de jubilación. Estos requisitos de acceso están regulados en el artículo 205 del Real Decreto Legislativo 8/2015, de 30 de octubre, de la Ley General de la Seguridad Social.
En el caso de no llegar a los 15 años cotizados, se puede optar por acceder a la pensión no contributiva de jubilación.
¿Qué pensión me corresponde con 15 años cotizados?
Muchos trabajadores hacen el cálculo con su sueldo, es decir, suman sus salarios de los últimos 25 años, pero no es así. Al igual que sucede con las prestaciones por desempleo contributivo, la cuantía no se calcula por el salario, sino por la base de cotización.
La Seguridad Social calcula la pensión teniendo en cuenta las bases de cotización de los últimos 25 años, es decir, las 12 bases de cotización que el trabajador ha tenido en cada uno de esos años. Esto lo puedes comprobar consultando el informe de cotizaciones.
En total son 300 meses, es decir, 300 bases de cotizaciones, que la administración sumara y luego dividirá por 350 y obtendrá la base reguladora.
Ahora, con la base reguladora calculada, se aplica un porcentaje correspondiente a los años cotizados. Para cobrar el 100% de esa base reguladora habrá que cumplir con los años exigidos para ello. En el caso de tener solo 15 años, se tiene derecho al 50% de la base reguladora.
Ahora bien, El Gobierno fija cada año en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) una cuantía mínima de jubilación. Si el resultado es inferior a esta cuantía, esta se complementará hasta llegar al mínimo. Es lo que se conoce como complemento a mínimos, aunque para ello hay que cumplir unos requisitos.
Las cuantías mínimas de las pensiones en 2023 son las siguientes:
- Con cónyuge a cargo: 966,20 euros al mes (13.526,80 euros anuales).
- Sin cónyuge: 783,10 euros mensuales (10.963,40 euros anuales).
- Con cónyuge no a cargo: 743,30 euros mensuales (10.406,20 euros anuales).
¿Qué pasa si no se llega a los 15 años cotizados?
Si tras llegar a la edad legal de jubilación no se alcanzan los 15 años de cotización, el trabajador puede optar por una pensión no contributiva, aunque para ello es necesario demostrar tener una vulnerabilidad económica y contar con rentas inferiores a los 6.784,54 euros.
